Descripción
El ácido ascórbico, también conocido como vitamina C, es una sustancia soluble en agua que se encuentra en una gran variedad de alimentos como las frutas cítricas, las bayas y las verduras de hojas verdes. Este compuesto se utiliza comúnmente como aditivo en la industria alimentaria para prevenir la oxidación y la decoloración de los alimentos, además de actuar como conservante.
Una de las principales característica de este producto es la capacidad de reducir la velocidad de la oxidación de los lípidos y las proteínas, lo que ayuda a mantener la calidad y la vida útil de los alimentos. Además, el ácido ascórbico tiene un efecto sinérgico con otros antioxidantes, lo que aumenta su eficacia en la protección de los alimentos contra la degradación.
Su uso más común es como antioxidante en productos alimenticios cárnicos, frutas, panadería, entre otros, ya que evita la aparición de sabores y olores desagradables. Esto significa que puede reducir la oxidación de los ingredientes y evitar la decoloración. Por ejemplo, cuando se rocía sobre frutas cortadas, el ácido ascórbico puede prevenir que se vuelvan marrones. Debido a sus numerosas aplicaciones culinarias, es altamente valorado en la creación de platos innovadores y bebidas exclusivas en la cocina molecular.
En su forma pura, el ácido ascórbico es un polvo cristalino blanco que se disuelve fácilmente en líquidos (permite una sencilla dilución en agua). A diferencia del ácido cítrico, que tiene un sabor agrio y una acidez muy marcada, el ácido ascórbico presenta una acidez más sutil y un sabor ligeramente ácido, pero agradable.
Dosificación: 1-2 gr/l